Dudo que exista un hombre más sexy que Sandro, el Gitano. Es sensualidad bruta, animalidad pura, mirada de macho, manos de seductor y caderas que estremecen de pensamientos lujuriosos a cualquier mujer que se detuviera  un instante a escucharlo y a admira

Veronica Barbosa Elizondo

Dudo que exista un hombre más sexy que Sandro, el Gitano. Es sensualidad bruta, animalidad pura, mirada de macho, manos de seductor y caderas que estremecen de pensamientos lujuriosos a cualquier mujer que se detuviera un instante a escucharlo y a admira


0 0